Invasión de alas

Aves que no vuelan
han invadido la ciudad

Dan pequeños saltos
apenas tocan los adoquines

Oscurecen la plaza
como papeles quemados

Sobre nuestros monumentos
hacen irreverencias

Se zambullen en la fuente
sacuden sus alas
toman sol

Algunas se posan en los quicios
como los grajos de un escudo
y nos vigilan

La gente
resignada ante la invasión
ha empezado a buscar
sus mejores granos para alimentarlas

ELVA MACÍAS